Francisco Maradiaga, escultor por herencia
El joven Francisco Maradiaga, es un escultor de Managua que desde los 11 años aprendió a tallar sobre piedra, arte que heredó de su madre, doña Claudia Pérez, quien lo encaminó para dedicar su vida a esta habilidad.
Francisco, comenta que gran parte de su obra está inspirada en su entorno, en lo que mira y lo que le gusta, ya sea un animal o la anatomía humana, tanto masculina como femenina, porque es un detonante a la inspiración artística.
Para él, el arte es la expresión del interior. Hace lo que su corazón le indica y lo representa en sus esculturas, le gusta que sus obras puedan ser observadas, para que de esa manera puedan transportar un recuerdo, un sentimiento o un deseo.
También piensa que la persona que encuentra algo en internet y lo copia, no tiene interés en aprender y dedicarse al arte, porque el arte no es para copiarse, sino para crear y expresar algo nuevo.
Se define como un escultor diversificado, porque a través de los años ha logrado tallar y elaborar esculturas en piedras de distintas durezas, maderas, metales y combinaciones de todos los materiales.
Reconocimientos como escultor
Francisco Maradiaga, en los últimos años ha obtenido primeros lugares en varias plataformas por sus obras incluyendo Nicaragua Diseña, en el que alcanzó el primer lugar como el “Mejor stand” en la Expo Feria del 2018.
Sin embargo, su pasión lo ha llevado a creer que el los reconocimiento lo han motivado a compartir su arte con los demás, y que las personas puedan interactuar directamente con él y sus obras.
Su sueño de exponer sus obras fuera del país
El joven escultor, es una persona visionaria y asegura que su más grande sueño es poder un día exponer un par obras especiales fuera del país.
Igualmente, mostrar que en Nicaragua hay artistas potenciales que pueden asombrar en el exterior y exponer el arte de la escultura a otros.